La generosidad es un valor de todo ser humano, como también una cualidad de las personas que se caracteriza por ayudar al prójimo, brindando una mano amiga de un modo honesto y desinteresado. Ser generoso se aprecia y considera como rasgo de bondad entre las personas y existen muchos ejemplos de como serlo.
Ser Generoso desinteresadamente
Como personas, tenemos el potencial de aprender a dar lo mejor que somos y tenemos hacia el prójimo, bien sea material o espiritual, puede tratarse de:
- Un consejo
- Horas de compañía
- Ideas para guiar a una persona que resuelva un problema difícil
- Dar con convicción y afecto sin la espera de tener una retribución a cambio
La generosidad es una virtud que suma felicidad, paz interior, ilusión y alegría a tu vida porque el amor que das vuelve con más fuerza a ti, siempre que no lo hagas para resaltar entre otros o para hacerles ver que se puede ser generoso.
Ser generoso no debe ser tomado como una hazaña, o un acto heroico espectacular, el dar se da porque se quiere hacerlo. El ofrecer es un sentimiento natural que nace de brindar ayuda o una mano amiga. Algo ofrecido por voluntad, bien sea material, una palabra de aliento, tiene mucho más valor que solo algo dado por obligación y para recibir remuneración.
Una persona generosa recibe más generosidad en su vida, en los momentos justos y de forma gratuita, ese él es gran valor que ofrece la generosidad en muchos y para muchos, enseñar este valor es indispensable para mantener una sociedad solidaria.
10 ejemplos de generosidad
Ser generoso es poner en práctica ese valor de entregar a los demás lo que se tiene sin esperar nada a cambio, de forma honesta y abierta. A continuación, te brindamos diez ejemplos de generosidad que puedes ver en la sociedad e identificarte con ellos.
En tiempos de emergencia, ayudar sin esperar nada a cambio, como los bomberos, que actúan inmediatamente para salvar vidas de situaciones de peligro, exponiendo incluso su vida. Las emergencias son imprevisibles y necesitan de apoyo de forma inmediata, y la generosidad se refleja en el tiempo y en la urgencia que estos grupos de personas entreguen para ayudar a desconocidos.
Pixabay

Hacer voluntariado, colaborar en actividades sociales que aporten un beneficio a la comunidad, en una situación en particular o de forma constante, donde se invierte solo tiempo y esfuerzo individual. Participar en estos grupos, ayuda a conocer otras realidades y compartir el valor de ser solidarios o generosos con otros, que también están dispuestos a ayudar a los demás sin ningún interés.
Compartir con los otros, puede ser también pequeños gestos de cariño compartiendo comida o ropa, que sea por propia iniciativa.
Hacer pequeñas donaciones, donde lo importante es la cualidad de los que se entrega, son igualmente muestras de cariños y preocupación por una causa donde se sabe lo que se entrega es un gesto que puede hacer la diferencia para quien lo recibe.
Pixabay

Ayudar a los más necesitados, bien sea por una discapacidad, adultos mayores. Incluir estos grupos en la sociedad con una pequeña visita o sonrisa es una muestra de generosidad, y que significa mucho para ellos.
Donar sangre, puede salvar una vida y se puede hacer en un corto tiempo, y puede significar la diferencia entre la vida y la muerte para un desconocido.
Pixabay

Cuidar del medio ambiente, pueden ser pequeños actos que beneficien el entorno en que vivimos, y no existe una exigencia para recoger basura, reciclar, o crear conciencia medioambiental con nuestro circulo intimo pero se hace de todos modos.
Pixabay

Compartir con las personas sin hogar, entregar a aquellos que no tuvieron las mismas oportunidades que aquellas que tienen un hogar es un símbolo de solidaridad y empatía, es un pequeño gesto que genera un sentimiento de pertenecía a aquellos que no tienen nada, y desarrollar la solidaridad.
Participar en grupos de apoyo, ayuda a una mejora en la convivencia social, y a la creación de una mayor diversidad, a pesar de que no se necesite de apoyo, la persona se involucra en aquellos que lo necesitan facilitando la inclusión social.
Pixabay

Donar objetos, aquellos que no usamos, y a que a veces terminan en la basura, o llenos de polvo, es además de un acto de generosidad, darle un buen uso a las cosas. Existen asociaciones que clasificarán y destinarán los objetos para causas solidarias, la generosidad está en los pequeños actos que requieren de un mínimo esfuerzo y tiempo, y que harán una gran diferencia para otros.
Practicar la generosidad, es también una forma de solidaridad con el prójimo, una virtud que podemos expresar durante todo el año, o en momentos especiales, contribuyendo bien sea económicamente, con tiempo y en campañas eventuales. Se puede ser parte de un grupo, o tomar la iniciativa de llamar a un grupo de amigos que se identifiquen con tu causa solidaria, y lanzarse a la aventura.
De esta forma inician sus actividades diversas asociaciones, y organizaciones, como la Fundación Alma Amiga que practican la generosidad y la solidaridad todos los días, gracias a la labor incansable de sus voluntarios, embajadores y colaboradores como Enrique Alberto Romero Domínguez, desarrollando los Proyectos Humanísticos en diferentes comunidades, cuidando del adulto mayor y poniendo en marcha programas formativos dirigidos a los niños para empoderarlos brindando herramientas hacia su autonomía, a través del autoconocimiento.
Fundación Alma Amiga Prensa

Un comentario en «Sé una persona generosa»
Bendiciones por su hermosa labor. Me gustsria pertenecer a la fundación me identifico mucho con su labor tan generosa .soy de zaraza estado Guárico me encantaría visitaran mi pueblito